La trombosis, causada por la presencia de un coágulo en una o más venas o arterias, es muy peligrosa y debe tratarse lo antes posible para que no circule por el cuerpo y cause más daño.
Para prevenirlo, es importante beber abundante agua diariamente, evitar la ropa ajustada, practicar actividad física regular, mantener una dieta saludable, evitar pasar demasiado tiempo sentado y evitar el tabaquismo y el consumo excesivo de alcohol.


La infertilidad masculina puede ser causada por varios factores, pero los principales son: problemas anatómicos, inflamación o infección en los testículos, problemas con el transporte de los espermatozoides, cambios hormonales que pueden afectar la producción de espermatozoides, cáncer y el uso de algunos medicamentos. 👀

Si usted o un ser querido tiene mala circulación, uno de los primeros síntomas que puede notar es el frío en las piernas y los pies. Por muy desagradables que sean las extremidades frías, la mala circulación puede ser un síntoma de una enfermedad subyacente más grave. Otros síntomas a tener en cuenta incluyen:
Un infarto ocurre cuando el flujo de sangre al corazón se interrumpe de alguna manera, puede ser por un exceso de grasa o por un coágulo. Por eso, hemos separado algunos consejos sobre cómo puedes evitar un infarto ☝:

El síndrome vasovagal es una pérdida transitoria de la conciencia provocada por una disminución de la presión arterial y del ritmo cardíaco por la acción del nervio vago.
La principal manifestación de este síndrome son los desmayos y los primeros signos son debilidad, sudoración, palidez, mareos, visión borrosa y dolor de cabeza. Los ambientes cerrados o concurridos, el estar en ayunas e incluso las grandes emociones pueden causarlos.

La bronquitis, la sinusitis y la rinitis se consideran enfermedades respiratorias responsables de obstruir las vías respiratorias superiores e inferiores y afectar los pulmones. Sin embargo, a pesar de tener síntomas similares, existe una diferencia entre ellos, echa un vistazo a:
🔹Bronquitis: Esta enfermedad se caracteriza por la inflamación en la región de los bronquios - conductos que llevan oxígeno a los pulmones. Así, los bronquios comienzan a acumular secreciones y se produce el espacio destinado al paso del oxígeno, lo que hace que la respiración sea más difícil, lenta y fatigosa. Los síntomas más comunes son tos, sibilancias y dificultad para respirar.